Renacer, morir, transformarse... ¿Acaso no son verbos
absolutamente relacionados? Las personas como yo (personas que han asumido y
comprenden su personalidad múltiple), tenemos nuestras ventajas y nuestras
desventajas.
La primera
ventaja es que podemos nacer, morir y transformarnos tantas veces como queramos
y dejar atrás todas las personalidades que no nos gustan, sustituyéndolas por
otras nuevas.
La primera
desventaja es que acumulamos experiencias y a veces -sólo a veces, que conste-
no sabemos con qué personalidad las hemos vivido, por lo que corremos más
riesgo de tropezar en varias ocasiones en nuestra vida con la misma gran
piedra.
Si llegaste
hasta aquí, te pido un favor: ¡Guarda mis secretos!
Hecho.
ResponderEliminarNo diré ni múuuuuu
Cuento contigo...
ResponderEliminarGracias.
Un beso tan salvaje como tú.
A tus secretos primero quiero disfrutarlos, intuyo que lo haré desde tu pluma muy excitante. Y prometo guardarlos sólo para mi.
ResponderEliminarOtro abrazo.
Gracias...
EliminarUn beso secreto.
Li guardará tus secretos...
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Gracias.
ResponderEliminarUn beso silencioso.