Se llamaba Mario o eso decía. Coincidimos en un camping de vacaciones. Un cruce de miradas en el restaurante y saltaron chispas. Con él aprendí el inmenso placer que proporciona amarse bajo el agua, con esa maravillosa sensación de
que la sal , mezclada con los jugos íntimos del cuerpo, produce un efecto
purificador y regenerador de energía como pocos...
Hablaba él, además, con una encandiladora verborrea y una sonrisa blanca de anuncio, sobre la comunión de almas, sobre la conexión del corazón a través de ese contacto carnal... Afirmaba que había encontrado en mí a la mujer que siempre había estado buscando. El delirante rito diario de la cópula submarina se hacía de ese modo mucho más intenso y pasional; yo sentía flotar mis pensamientos en los azules del mar con la convicción de qué ese amor de verano no llegaría a su fin cuando terminaran mis vacaciones.
Hacíamos el amor cada tarde, cuando la gente comenzaba a marcharse de la playa, en una ceremonia íntima y mágica que comenzaba con un ritual de besos salados y lenguas enredadas y lascivas. Salir a respirar acompasados formaba parte de la danza de cuerpos enervados por el deseo... La piel caliente y fría al mismo tiempo, erizada y llena de fuego, salada y dulce. Una inolvidable fiesta para los sentidos.
Hablaba él, además, con una encandiladora verborrea y una sonrisa blanca de anuncio, sobre la comunión de almas, sobre la conexión del corazón a través de ese contacto carnal... Afirmaba que había encontrado en mí a la mujer que siempre había estado buscando. El delirante rito diario de la cópula submarina se hacía de ese modo mucho más intenso y pasional; yo sentía flotar mis pensamientos en los azules del mar con la convicción de qué ese amor de verano no llegaría a su fin cuando terminaran mis vacaciones.
Hacíamos el amor cada tarde, cuando la gente comenzaba a marcharse de la playa, en una ceremonia íntima y mágica que comenzaba con un ritual de besos salados y lenguas enredadas y lascivas. Salir a respirar acompasados formaba parte de la danza de cuerpos enervados por el deseo... La piel caliente y fría al mismo tiempo, erizada y llena de fuego, salada y dulce. Una inolvidable fiesta para los sentidos.
Qué pena (o qué suerte) que acabara todo aquello, diez días después y también bajo el agua, cuando una mañana en la que me dijo que tenía que ir a la ciudad, mientras yo buceaba con mi cámara acuática para sacar bonitas fotos al
fondo marino, le encontré de esta guisa con otra pareja de baile... Al parecer, el rollito de la comunión de almas y las conexiones espirituales, se lo soltaba a todas.
Esta vez sí pudo quedarse a gusto mi Eva vengativa, porque colgó las fotos en el tablón de anuncios del camping esa misma mañana y comentó en sus redes sociales el asunto. Por la tarde, el playboy de pacotilla tenía a tres mujeres vociferantes esperándole en la puerta de su bungalow con cara de pocos amigos para pedirle explicaciones, incluida la de la foto. Me imagino que a otras tantas en las redes sociales y en el teléfono. Me mandó un montón de mensajes con inverosímiles explicaciones antes de que le bloqueara y le borrara de mis contactos en todo el mundo virtual.
Esta vez sí pudo quedarse a gusto mi Eva vengativa, porque colgó las fotos en el tablón de anuncios del camping esa misma mañana y comentó en sus redes sociales el asunto. Por la tarde, el playboy de pacotilla tenía a tres mujeres vociferantes esperándole en la puerta de su bungalow con cara de pocos amigos para pedirle explicaciones, incluida la de la foto. Me imagino que a otras tantas en las redes sociales y en el teléfono. Me mandó un montón de mensajes con inverosímiles explicaciones antes de que le bloqueara y le borrara de mis contactos en todo el mundo virtual.
Oh, el mar, esa alcoba (una más) de las infidelidades. Por lo demás es lo que tiene enrollarse con un pulpo. Que cada cual se atenga a las consecuencias y luego no vaya reclamando al maestro armero.
ResponderEliminarJo... Ya he aprendido a detectar pulpos. Pareces mi hermano mayor, Fackel... ja ja.
ResponderEliminarUn beso de secano.
¿Pero te lo pasate bien o no?
ResponderEliminar;)
Claro que lo pasé bien... unos días, ja ja. Y mi Eva vengativa disfrutó de lo lindo después.
EliminarUn beso sonriente.
A cada cerdo le llega su San Martín.
ResponderEliminarBien hecho.
Pues eso. Salvo que se apodere de mí mi Eva mística -cosa que ocurre sólo muy de vez en cuando-, siempre que puedo, la devuelvo.
EliminarUn beso amigable.
Reconozco que a los que estáis muy experimentados en el sexo os gusten las chorradas, perdón, digo, las nuevas experiencias, pero lo de "...La piel caliente y fría al mismo tiempo, erizada y llena de fuego, salada y dulce...", no deja de ser un oxímoron, jajajajajaja. Pero entiendo que después de medio ahogarse una son esa pasión submarina tan poco sugerente tengas que añadir "...Una inolvidable fiesta para los sentidos". Jjajajajaja. Eres grande.
ResponderEliminarBeso.
Las experiencias te dan criterio para poder opinar... ¿no crees? Así puedes elegir mejor. Claro que yo aún no he aprendido a elegir y eso también es verdad. Será que soy lentita... Me alegra hacerte reír.
EliminarGracias por venir y por opinar tan libremente.
Te quiero igual.
Un beso con morritos.
PD: No te ahogas bajo el agua, pero hay que aprender la técnica, claro.
Y se sale fuera también a ratos... ;)
Y qué bien sienta la venganza en plato frío… En esta ocasión, además, en remojo.
ResponderEliminarDicen que la venganza no es buena, pero qué tendrá ese lado oscuro que tanto nos atrae…
Un placer leerte, Eva.
Bsoss muchos, y feliz finde 💙
Sí... Eso de enfadarse y saltar... no merece la pena. Es mejor devolverla.
EliminarUn beso sonriente.
Chulitos de playa no faltan a lo largo de la costa, está bien ponerlos en su sitio, y si la esperiencia mereció la pena... Pues mejor.
ResponderEliminarPor cierto... Personalmente soy más de Piscina o jacuzzi.
Saludos Eva. S y compañia
Yo, directamente, más de jacuzzi. Da más juego. Pero aprender cosas nuevas, siempre me gusta.
EliminarUn beso acuático.
Muy bien contado, desde la primera persona, que engancha al lector, porque lo a sume biográfico, el cuento, pero esa apetencia por el yo, es una peculiaridad de tu narrativa, que sabes manejar con habilidad, con un sutilizado humor en la vindicta, que asoman en tus relatos.
ResponderEliminarUN abrazo desde mi cubil colombiano. Carlos
Gracias. Mi madre me enseñó a afrontar los problemas con valentía y a llevarlos con humor... No merece la pena llorar, si te puedes reír.
EliminarUn beso risueño.
Habrá que hacer un estudio de porque alguien que tiene una compañera de "juegos" necesita jugar con "alguienes" diferentes.
ResponderEliminarSi lo "bailao" valió la pena, eso sacaste de bueno.
Veo que la Eva vengativa es de mucho cuidado.
Aprender siempre merece la pena, aunque sea aprender cosas que no quieres repetir. Creo que era un inconfeso adicto al sexo, además de tonto.
EliminarMi Eva vengativa fue suavecita aquí, ja ja... Ya conocerás otras venganzas más terribles...
Un beso de amistad.
jugada maestra, sí señora
ResponderEliminarLe rompí el chiringuito del verano. Seguro que lo reconstruyó otra vez, pero supongo que tomaría más precauciones al elegir a sus víctimas...
EliminarUn beso veraniego.
Desde luego que hay de todo en esta vida, y es una pena que la mentira, para conseguir un objetivo, sea tan común, en algunas personas. Me gusta el final con ese toque tan especial.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un toque muy de Eva... Hay gente que no merece la pena, aunque la vida sí la merezca.
EliminarUn beso optimista.
Vaya tela las cosas que te pasan...
ResponderEliminarBesos.
Mis amigas siempre me dicen que debería escribirlas... ja ja. Y eso hago.
EliminarUn beso entelado.
Bueno se ve que era un galán de pacotilla el tal amante... lo bueno es que la Eva vengativa le supo dar su merecido.
ResponderEliminarInteresante tu relato, muy entretenido.
Besos al alma.
De pacotilla total.
EliminarBesos al alma también para ti.
Sere morbosa ya que voy a quedarme con la locura de hacer el amor bajo el agua y laidea de esa pasion que todo desborda.
ResponderEliminarSi puedes pruébalo. Es una experiencia única...
EliminarUn beso loco.
Quédate con la experiencia submarina que es espectacular jejejeje
ResponderEliminarSin duda. Mi Eva positiva siempre gana a las demás... o casi siempre.
EliminarUn beso positivo.
Mmmmm besos salados qué ricos, disfrutásteis esos días, aunque lo que vino después estuvo fatal, yo opino como Tracy, quédate con esa maravillosa experiencia, y lo peor olvídalo.
ResponderEliminarUn besazo.
Tú me conoces, María. Yo vivo, si tengo que vengarme, me vengo y luego paso página. Con la de gente que se porta mal con los demás, no podría vivir en paz sin pasarla.
EliminarUn beso relajado.
La verdad es que sí hace falta ser tonto y prepotente para pretender encima reconducir la situación con inverosímiles (como tú dices) explicaciones.
ResponderEliminarBesos.
Le salí rana.... ja ja. Se merecía una venganza peor, pero en vacaciones... prefiero disfrutar del sol y los amigos.
EliminarUn beso listo.
jajajajaja
ResponderEliminarHay que reconocer que Mario estaba en forma!! jajaja
Debió de ser sabrosa esa venganza. Nunca me he vengado de nadie, tal vez debería probar
Un beso cómplice
Vengarse en frío es altamente recomendable para la salud. Si lo haces pensando que la persona de la que te vengas aprenderá una lección y que en el fondo le haces un bien, es fácil...
ResponderEliminarUn beso pacífico.
Vaya experiencia, Eva. Quédate con lo aprendido y pasa página, como dices.
ResponderEliminarMil besos.
Eso hago, Lucía. Eso hago.
EliminarUn beso paginado.
sí, a veces los que te hablen de conexiones espirituales y cosas elevadas similares, luego son los peores. mejor alguien que sea más sencillo y campechano, pero que no te la juegue.
ResponderEliminarme gusta tu blog, me quedo. besos!!
Gracias por quedarte cerca.
EliminarLos charlatanes son los peores casi siempre. Lección aprendida.
Un beso silencioso.
Se coge antes a un mentiroso que a un cojo... tarde o temprano tenía que pasar. La venganza se sirve en plato frío y sienta genial.
ResponderEliminarMil besitos, Eva.
Sí!!! La venganza es sabrosa si se sabe tener la cabeza fría...
EliminarUn beso conectado.
Waw... Tremenda historia e histeria la de sus amantes burladas (excepto tu).... Suerte de algunos
ResponderEliminarPaz
Isaac
Un sinvergüenza que tuvo su lección... ja ja.
EliminarUn beso pacífico.
Son lecciones de la vida que nos pone, para saber actuar, las experiencias así mejor pasar página.
ResponderEliminarUn tierno abrazo.
Sí, pasemos página...
EliminarUn beso contento.
"el que mucho abarca, poco aprieta" (de una forma o de otra).
ResponderEliminaral final al que "apretaron" y de qué forma, fue a él.
un beso.
Y " A cada cerdo le llega su San Martín", como dice Toro.
EliminarUn beso desapretado.
Ya lo han comentado antes, las mentiras tienen las patas muy cortas, no se puede ir así por la vida en los tiempos que corren.
ResponderEliminarEn fin cada cual es como es y sus circunstancias.
Un Abrazo.
Cada uno es como es, y allá con sus consecuencias...
EliminarMenos mal que otros sois como sois y hacéis que el mundo sea mejor.
Un beso circunstancial.